La domótica es una tecnología que permite aumentar el confort y la eficiencia energética en el hogar. Cuando hablamos de usar la domótica para controlar la calefacción nos referimos a poder controlar de forma remota e incluso automatizar el sistema de calefacción para ahorrar tiempo, ganar en comodidad y reducir la factura de electricidad.
Vivimos en una época de la historia en la que es tendencia automatizar procesos sencillos o rutinarios. Porque la tecnología actual lo permite y además a un bajo coste. Ya sea mediante dispositivos móviles o conversando con asistentes de voz, lo que hace unos años pacería el futuro a largo plazo, resulta que ya está aquí para quedarse.
En los meses de otoño y especialmente en invierno la calefacción es un elemento fundamental en cualquier hogar. Aunque estemos en Málaga, ya se sabe que muchas viviendas no disfrutan de un buen aislamiento térmico. Por lo que el consumo de la calefacción puede ser una parte considerable de la factura de electricidad.
Un sistema de calefacción domótica puede contribuir a reducir el consumo de forma apreciable.
Beneficios de la domótica para controlar la calefacción
La mayoría de sistemas de calefacción actuales ya permiten programar los días y horas de funcionamiento. Este es el punto de partida de un sistema de domótica, es decir, lo más básico es una programación horaria, veamos qué más puede ofrecer:
- Mayor comodidad, porque cuando usamos la domótica para controlar la calefacción lo podemos hacer desde el sofá, desde el coche cuando vamos camino de casa o desde antes de salir del trabajo o del gimnasio. Control total desde cualquier sitio a través de cualquier dispositivo conectado a Internet.
- Zonificación, es una palabra que se refiere a la posibilidad de controlar la temperatura de cada zona o estancia de la casa de manera independiente. Si hay un cuarto de invitados o una sala donde no hay nadie, podemos indicar al sistema que no las caliente. Se acabó ir recorriendo la casa abriendo y cerrando llaves para regular la temperatura.
- Programación horaria eficiente, es decir, en lugar de encender la calefacción a tope cada vez que llegamos a casa, podemos programar el sistema para que mantenga una temperatura suave cuando no hay nadie en casa, unos 15º por ejemplo, y luego suba a 21º cuando volvamos. De esta manera que el esfuerzo y consumo sea menor para alcanzar la temperatura ideal.
- Sistemas inteligentes, sería el siguiente paso, nos referimos a implementar detectores, ya sean de temperatura o de apertura de ventanas por ejemplo, así en función de la temperatura de la estancia o de las acciones el sistema de calefacción se apaga o se enciende para ahorrar energía. Porque la domótica es mucho más que programar horarios o ejecutar acción a través de un asistente de voz.
- Sistemas eficientes y ecológicos, por nuestra experiencia la incorporación de bombas de calor de aerotermia para calentar el hogar mediante suelo radiante o radiadores de baja temperatura a la larga ofrecen un ahorro de energía considerable. Estos modernos sistemas de energía renovable contribuyen a reducir la contaminación y al controlarse mediante sistemas de domótica se puede exprimir todo su potencial.
La ecología y la sostenibilidad están de moda, pero probablemente sea una tendencia que va a asentarse. La sociedad, y en especial las nuevas generaciones, tienen una mayor concienciación sobre el respecto al medio ambiente y actitudes responsables que ayuden a cuidar el planeta. Por tanto, vamos hacia un futuro donde va a predominar la domótica con sistemas inteligentes, altamente eficientes y ecológicos.
Domotizar la calefacción
Para domotizar la calefacción del hogar será necesario contar con equipos capaces de conectarse por la red local, Wifi u otros protocolos como Z-Wave o Zigbee. Así los podremos administrar de forma remota y coordinar con otros equipos para lograr un hogar inteligente.
Estos sistemas podrán encender o apagar equipos de calefacción como calderas o bombas de calor, así como configurar los diferentes parámetros que ofrezca cada fabricante, hacer una lectura de los datos que proporcionen los termostátos, las sondas de temperatura o humedad y otra serie de elementos que permiten sofisticar el sistema de decisión del hogar inteligente.
Para presupuestos más reducidos existen aparatos que permiten «modernizar» algunos sistemas de calefacción o climatización. Es decir, evitan tener que cambiar toda la instalación dotando al sistema de conexión remota a través de la red local o de Internet. Así el usuario puede dar sus primeros pasos en el mundo de la domótica.
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